La memoria

No hace mucho, vivía solo y las tareas de la casa las realizaba con diligencia. Tuve que prepararme con lecturas de cocina, chismografía y moda. Aprendí a planchar, cocinar y limpiar. Era un fenómeno.

Ayer, por causas varias, me encontraba solo y el desayuno lo preparé yo. Cuando entré en la cocina, lo primero, vaso de agua templada con limón y manzanilla. Este potingue me ‘entona’.

Después el tostador se encargó de dos rebanadas de pan. Hice un sanguis con aceite de oliva, pimienta de cayena, sal, tomate triturado, semillas de calabaza y nueces. Sí, es una rareza.

Con todo preparado, cuando me disponía a comenzar el almuerzo descubro que el sanguis lo ‘empapé’ con el aceite y el tomate triturado y no tenía cuchillo, me levanto a por él, parto por la mitad el sanguis y entonces descubro que no tenía tenedor, otro viaje a por el tenedor. Aunque había desayunado solo infinidad de veces se me había olvidado poner lo necesario en la mesa para que fuera un desayuno confortable.

Tenía la cabeza más pequeña?, menos sesos? o había borrado alguna parte de mi software? No, había perdido el hábito, borrando temporalmente estos trabajos, no los necesitaba. Así es todo. Si no lo usas…

A lo que voy….cuando aparecimos los humanos en la Tierra, según los estudiosos, (hay gente para todo) nacimos en el hueco que dejaron los dinosaurios. Se entiende, según esa teoría, que los cambios que se produjeron en la Tierra fueron tan grandes que para que los dinosaurios siguieran viviendo la naturaleza tenía que modificarlos.

No hace falta decir, ya lo he comentado otras veces, que la Naturaleza no se anda con chinitas y cuando tiene que modificar modifica y este caso, por lo que parece, no modificó sino que cambió a habitantes más manejables, o eso creía. Igual que hacemos nosotros con el coche, si tiene muchos problemas su reparación, lo dejamos en el chatarrero y compramos otro.

Por los dibujos, tan familiares, que, desde siempre, han estado presentes en los libros de nuestra infancia, recordamos las mandíbulas y dientes tan enormes que tenían nuestros más lejanos parientes así como su cerebro empujado hacia atrás. Es decir, tenían unas mandíbulas y una dentadura grande y fuerte y un débil cerebro. Se entiende, fácilmente, si pensamos que su única herramienta para cortar y masticar eran sus dientes.

Cuando mucho tiempo después aprendieron a fabricar y usar herramientas rudimentarias, especialmente líticas, para cortar, comenzaron los cambios en su fisonomía reduciendo las mandíbulas y aumentando el volumen de su cerebro.

La capacidad del cerebro, la que tenemos ahora, los sapiens-sapiens, es igual, o similar, a la que tenían hace miles de años y los avances, en todos los órdenes, que hemos desarrollado los humanos y nuestra belleza se los debemos al cuchillo.

Como ven no era una torpeza levantarme por el cuchillo. Lo digo porque a veces….

Tengan un hermoso día.

En mi Quinta: 15-01-2022

Paleontología

Cuando hace bastantes años, por casualidad, llegó a mis manos el primer libro de paleontología no podía imaginar que su lectura me despertara tanta atracción.

Lo que más me impresionó, como contaba el libro, fue la historia sobre el descubrimiento de un esqueleto de mujer de 1,20 de estatura, milagrosamente completo. Era de una mujer homo erectus. Era Lucy, o Eva de África, mitocondrial.

Lucy de África, junto con las mujeres que había en África, fue, es, la madre de la Humanidad.

El ADN mitocondrial es el material genético que se localiza en el interior de las mitocondrias celulares. Se hereda por vía materna, es decir, aunque tanto los hombre como las mujeres tenemos ADN mitocondrial, son las mujeres quienes transmiten ese material a su descendencia. Por eso los linajes mitocondriales de aquellas mujeres que sólo tienen hijos varones, o no tienen hijos, terminan por extinguirse; para que no haya extinción siempre tiene que haber una hija que tenga hija, si esto no ocurre: un linaje mitocondrial menos. Así, transcurrido un tiempo lo suficientemente largo sólo quedará un linaje.

La madre mitocondrial, evidentemente, no estaba sola; al contrario, tuvo un número desconocido de compañeros de ambos sexos, muchos de los cuales nos han legado copias de sus genes nucleares.

Con el fin de disponer de una cantidad suficiente de muestras para analizar, los científicos obtuvieron ADN mitocondrial a partir de células extraídas de las placentas de mujeres que habían dado a luz en hospitales de Estados Unidos. Los antepasados de estas madres procedían de todo el mundo —de Asia, Europa, Australia, Nueva Guinea, los afroamericanos representaban África—. En total, 147 individuos.

Tras un meticuloso estudio de los datos hallados, elaboraron un árbol genealógico que revelaba claramente el origen africano de la humanidad (coincidiendo con lo que Charles Darwin había propuesto un siglo antes). Demostraron la existencia de un antecesor común: una mujer que fue el único miembro de una población cuyo linaje de ADN mitocondrial ha sobrevivido hasta hoy.

De ahí surgió otra especie, hace 200,000 años, el Homo Sapiens y 40,000 años más tarde aparecemos nosotros, el Homo Sapien, Sapien.

Para los no creyentes de las certezas de la ciencia, que los hay, decir que, lo que dice la Ciencia siempre es verdad. La Ciencia hasta que no está completamente segura, guarda silencio. La Comunidad Científica, no permite publicaciones sin consenso.

Tengan un hermoso día.

En mi Quinta: 08-01-2022.

Al cumplir los noventa

Al cumplir los noventa.

Tengo un montón de pequeños proyectos pendientes que, hasta ahora, modificaba con frecuencia, de acuerdo con mi fantasía, y siempre acariciando el momento, feliz, de poder realizarlos.

Las fantasías, incluyo todas, que, desde que he tenido uso de razón me han permitido soñar despierto, las he alimentado, desde siempre, porque me hacían feliz. Mis proyectos pendientes, que siempre han existido, son, para mí, una necesidad y fábrica de ilusiones.

Mi estado actual, sin poder realizar un trabajo físico importante, que ya me correspondía, me ha llevado a refugiarme en la lectura de temas concretos que, hasta ahora, siempre habían sido ‘de todo’.

Ahora, en este momento, cuando siento la necesidad de conocer qué se esconde detrás de la Historia de la Humanidad, me ha llevado a lecturas de historias que ocurrieron en el mundo más antiguo, anteriores a la escritura de la Biblia.

Según la Biblia, a pesar de ser el libro más leído del mundo, el mundo tendría, ahora, algo más de 5.000 años de edad. No conocían los hebreos, cuando escribieron la Biblia, que el hombre, su antecesor, después de millones de años de evolución apareció en África y que, por los rastros que dejó, sabemos que era muy habilidoso, como atestiguan las pinturas rupestres que se han encontrado de hace más de 40.000 años de antigüedad, y las herramientas líticas encontradas en el lugar, o lugares, que habitó, ni cómo se distribuyó por Europa y Eurasia. Y también de los grandes mamíferos, que poblaron la tierra hace millones y millones de años. Según la Biblia estos mamíferos nunca habrían existido.

En mi juventud, tenía, en mi mesilla de noche, la Biblia según San Mateo y otros libros. En mi recuerdo, en este momento, Las Mil y una Noche.

Claro que la vida, en su largo caminar, te presenta muchos recovecos, algunos de difícil asimilación o difíciles de entender, pero está llena de cosas, por eso es tan bonita. Te da unas cosas y te quita otras pero al final, tu contabilidad mental, si eres positivo, te hace ganador.

Como, desde siempre, he sido curiosón y preguntón, un día se me ocurrió leer un libro de paleontología, quedé fascinado y con la boca abierta. Nunca pude imaginar lo que estaba leyendo y me picó tanto la curiosidad que seguí leyendo paleontología. Este relato, muy, pero muy resumido, es su consecuencia.

En Sumer, Sumer es un territorio dentro del gran territorio de Mesopotamia, que ocuparon los sumerios y donde se estableció la primera sociedad humana organizada y con el paso de los años se fundó la primera ciudad del mundo, Uruk y después Ur. Las ciudades de Uruk y Ur (Ur fue la cuna de Abrahán, personaje bíblico con gran transcendencia, que murió a los ciento setenta y cinco años, y que no se ha encontrado evidencia de su existencia a pesar de los esfuerzos e intentos por encontrarlo), se construyeron con barro, con adobes, único material posible en aquel tiempo, por lo que las lluvia destruía los edificios y sobre sus ruinas levantaban otros que con el tiempo eran igualmente destruidos.

Esta historia comenzó 10.000 a de C, cuando los primeros homos procedentes de África en busca un lugar donde la vida fuera más fácil, se distribuyeron por el mundo formando grupos y uno de los grupos se topó con este territorio muy fértil, entre dos ríos, el Éufrates y el Tigris, y acamparon en él definitivamente. En este lugar, cuenta la Biblia miles de años después, se encontraba el Paraíso.

Las ciudades de Uruk y Ur y todas las demás, que fueron muchas, fueron construidas con tierra, adobes, que inventaron los sumerios, único material que conocían para este menester. Este material, el barro, y las lluvias no son compatibles por lo que la vida de las viviendas era muy corta. La vivienda nueva se levantaba sobre los escombros de la vieja.

Cuando se construyeron estas ciudades la Tierra se encontraba en plena glaciación, dato que no conocían los sumerios, y el nivel del mar era 100 mt., inferior al actual. Cuando, miles de años después, esta glaciación, la última, duró 100.000 años aprox., comenzó el deshielo el nivel del mar fue subiendo y como consecuencia el de los ríos, inundando estas ciudades que quedaron enterradas. Las ruinas de la ciudad de Uruk no han sido encontradas todavía. Las de Ur se encontraron hace más de 100 años y el desescombro, por su coste, se está realizando muy lentamente y se tardarán muchos años hasta que se acabe de descubrir totalmente.

Qué se ha encontrado en las ruinas de Ur. Mil cosas, alhajas de oro, cerámicas, el cementerio de la ciudad, la tumba del Rey y algo muy importante, miles de tablillas de barro, escritas antes de que endureciera.

Las tablillas, algunas muy deterioradas, están escritas en cuneiforme, que es el más antiguo sistema de escritura conocido y fue traducido al inglés a mediados del pasado siglo.

Muchas de las tablillas encontradas correspondían a escuelas de escribas y muchas se encuentran repetidas por lo que ha sido posible, a pesar de su deterioro, su traducción completa.

Los sumerios inventaron la escritura, la rueda, las matemáticas, el sistema decimal, la cerveza, el vino apareció miles de años después de mano de los fenicios, el calendario de 12 meses y otros, 3.000 a de C.

A través de las tablillas conocemos los acontecimientos, la vida y costumbres de los ciudadanos de Ur y a su Rey, Cugalzagisi de Umma y su Dios, Nannar.

Ur, y todas las ciudades, que se construyeron en Sumer tenían rey y un Dios al que adoraban y al que le construían templos, centros de culto y monumentos que ahora, actualmente, adornan algunas ciudades del mundo. En una de las tablillas aparece la historia del Diluvio Universal. De su Diluvio Universal que, según cuenta, fue la noche de la gran lluvia que inundó el mundo. Se refiere a su mundo, al que conocían, como no puede ser de otra manera.

Cuando la mitología relata un acontecimiento, sobre una historia, sus personajes, son siempre seres sobrenaturales, espíritu.

En España en todas las provincias han existido mitos. Aquí, en Murcia, existen gran cantidad de ellos.

Existe una correlación entre la cultura de los pueblos y los mitos. También tiene que ver la cultura con los milagros, la vida de antes era más milagrosa que ahora. Ahora se puede decir, sin lugar a dudas, que los milagros no existen y también que no han existido nunca.

La filosofía intenta encontrar, mediante un nuevo método de conocimiento, el de la razón, un fundamento y unas causas a los mismos fenómenos que el mito daba como producidos por los seres divinos.

Pasen un hermoso día.

En mi quinta: 06-01-22