Como hoy, además de un hermoso sol, hace y molesto viento, he decidido que el mejor sitio para consumir la mañana es donde me encuentro en este momento, en mi sitio. Mi sitio es el lugar donde toman cuerpo mis fantasías y pensamientos mas estrambóticos que puedan imaginar. Dispone, además, de un teclado y una pantalla donde puedo escribir, que es lo que hago siempre que mi estado de ánimo lo permite y algo fantástico que utilizo con frecuencia, borrar todo, si procede, sin dejar huella.
Estaba pensando, en días de encerrona siempre ocurren estas cosas, que si a Ramón y Cajal, que recibió el Nobel de Medicina en 1906, en reconocimiento de su trabajo sobre la estructura del sistema nervioso realizados a través de su rudimentario microscopio, le hubieran regalado un microscopio como los que existen ahora, seguramente, a pesar de su gran conocimiento e inteligencia, no hubiera recibido el premio Nobel porque no hubiera sabido manejarlo.
Lo mismo pienso de Galileo, a pesar de que, en su tiempo, 1564-1642, no existía esta distinción, el Nobel, a la investigación y al conocimiento. Si en su tiempo le hubieran regalado un telescopio de los existentes en la actualidad, no hubiera sabido manejarlo y no hubiera descubierto Europa, Ío, Ganímedes, los Anillo de Saturno ni Calisto. (La fundación Nobel fue creada en 1900 y el primer premio se concedió en 1901).
Con estos ejemplos, y hay infinidad de ellos, trato explicar mi creencia de que el conocimiento de la humanidad, en sus diferentes disciplinas, se desarrolla y camina a un ritmo semejante y que cada disciplina se apoya, para su avance, del conocimiento y desarrollos de otras.
Tengan un hermoso día.
En mi Quinta 16-02-2024.
blog de pepe arnau